Educación Inclusiva

Módulo 10: Participación de la familia

¿Qué podemos hacer?

Actitudes favorables

Por último, quisiéramos hacer referencia a aquellas actitudes por parte del profesorado que pueden facilitar la comunicación con las familias y que, por tanto, sería recomendable que tuvieras presente a la hora de desarrollar cualquier actividad con ellas.

A continuación reproducimos algunas recomendaciones para los profesores propuestas por el Equipo Metra (2003,  pp.131-133) que pueden favorecer la relación con las familias y que se pueden hacer extensivas a la hora de trabajar con aquellas que tienen o no hijos con cualquier dificultad. También, pueden ser útiles a la hora de  trabajar con cualquier sistema familiar las aportaciones de  Cagigal (2005), Dowling (1996) o Leal (2008).

Entender la unidad familiar

  • Los miembros de la familia se influyen unos a otros.
  • La composición familiar varía
  • Cada familia es un recurso.
  • Las familias cambian con el paso del tiempo.
  • Cada familia es única desde un punto de vista cultural.
  • Los miembros de la familia proporcionan ayuda constante.
Fuente: Leal (2008, p. 35)

En relación con lo anterior es interesante escuchar lo que las familias dicen a los profesionales que trabajan con sus hijos. En los materiales para la formación de profesores elaborados por la UNESCO (1993), se da cuenta de las recomendaciones que un grupo de padres y madres elaboraron para los maestros  sobre cómo establecer mejores relaciones de trabajo con las familias.


La colaboración entre todos los miembros de la comunidad educativa, y en especial de las familias, es una de las claves para avanzar hacia la inclusión educativa. Fuente: Escuela 2 (Valencia).

La colaboración entre todos los miembros de la comunidad educativa, y en especial de las familias, es una de las claves para avanzar hacia la inclusión educativa. Fuente: Escuela 2 (Valencia).

Estas propuestas, pensadas desde el ámbito del trabajo de los profesores con las familias, coinciden con las propuestas de la «práctica centrada en la familia» que, como recoge Leal (2008) no es sólo una estrategia o un método de interacción con las familias, sino más bien una filosofía general mediante la que los profesionales pueden ayudar a las familias a desarrollar sus fortalezas y aumentar su sentimiento de capacidad. Entre sus características Leal (2008, p. 13) señala: concebir la familia como un sistema de apoyo social, reconocer la importancia del contexto de vida familiar en el desarrollo de los individuos, centrarse en las fortalezas y los recursos de las familias, creer que pueden desarrollar sus fortalezas y sus sentimientos de capacidad, invitar a los miembros de la familia a reuniones para que puedan compartir información, implicar a los miembros de la familia como participantes activos en cualquier proceso de planificación, cambiar el orden del día de una reunión para que cualquier miembro de una familia pueda plantear alguna preocupación concreta, dar autoridad y capacitar a la familia para que pueda funcionar de manera eficaz en su entorno.

En esta línea, y  en el marco de los apoyos para  avanzar hacia una educación inclusiva, se encontrarían los acuerdos de cooperación entre familias y profesionales que sugieren Turnbull, Turnbull y Kyzar (2009): competencia profesional, comunicación, respeto, compromiso, equidad en los acuerdos de colaboración y confianza.  En este sentido y como hemos venido mencionando a lo largo de todo este módulo, la cooperación entre la familia y la escuela se convierte, sin duda, en un elemento central de la red de apoyos que es necesario tejer para avanzar hacia la construcción de centros escolares cada vez más inclusivos.

Cerramos nuevamente con las palabras de Pennac (2008), en este caso para reconocer y agradecer el esfuerzo que día a tras día realizan profesores y profesoras que, como tú, que nos has acompañado a lo largo de estos diez módulos dedicando una buena parte de tu tiempo a reflexionar con nosotros,  creen que merece la pena luchar por construir una escuela cada vez mejor para todos.

«En este mundo hay que ser demasiado bueno para serlo bastante. Si añado que lograste llevar a aquel muchacho hasta el examen de bachillerato, habré dicho algo, poco, sobre los efectos de semejante bondad»

(Pennac, 2008 p. 218)