Hacer un Hormiguero |
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Para construir un hormiguero hay que tener un poco de paciencia pero es fácil de hacer y constituye una experiencia realmente apasionante y divertida.
(Para los más pequeños es una forma de aprender muy significativa y motivadora).
a) Los materiales necesarios
Solamente se necesita tierra, dos cristales o dos piezas de metacrilato, una base y laterales de madera, una tapa con orificios, y las hormigas.
Los cristales deben ser del mismo tamaño, aproximadamente de 30x30, aunque por supuesto depende de lo grande que queramos el hormiguero. Los cristales se fijan en una base de madera, con una separación de 1,5 cm, con el fin de apreciar bien las galerías que las hormigas vayan construyendo. Los componentes se pueden pegar con silicona, con cinta adhesiva o elástica.
La tierra que se introduce en el hormiguero debe buscarse en un lugar que carezca de materia orgánica, a ser posible arcillosa, evitando cualquier signo de putrefacción con el fin de evitar las infecciones y los hongos. La tierra se esteriliza dejándola unos días en el frigorífico y pasándola unos 20 minutos por el microondas a la máxima potencia. Así se asegura que no queda ningún microorganismo. Antes de meter la tierra se humedece un poco, pues las hormigas necesitan humedad.
Un procedimiento sencillo es coger la tierra de donde viven las hormigas, y ya está.
Cuando la reina ponga huevos en el nido se puede hacer un orificio a nivel de la tierra para permitir que las hormigas salgan y vuelvan continuamente
b) Para capturar una reina
Sin ella es imposible confeccionar un hormiguero. Hay que coger la que haya perdido ya las alas para evitar que no esté fecundada. Para capturarla es necesario armarse de paciencia, pues salen del hormiguero cuando ha llovido. Se reconocen por su mayor tamaño, y por el abdomen mucho mayor que el resto de sus compañeras.
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