Literalmente podríamos definir los paquetes MSI (Microsoft Installer) como instaladores de Microsoft, es decir, aquellos paquetes de software que contienen la información necesaria para automatizar su instalación sin necesidad de intervención manual del usuario en dicho proceso, no precisando por tanto el usuario introducir el número de serie del producto, ni el lugar de instalación del paquete, ni ningún otro parámetro, pues toda esa información ya va contenida en el propio fichero "msi".
Esta filosofía de trabajo permite que la instalación de los paquetes "msi" se pueda hacer de forma desatendida, y que el servidor "Windows 2003 Server" distribuya el paquete en cuestión a las estaciones de trabajo o usuarios del dominio deseados.
Esta tecnología se compone de dos partes complementarias: un servicio de instalador de cliente y un archivo de paquete "msi", de tal modo que el instalador utiliza la información contenida en el archivo de paquete "msi" para la instalación de la aplicación.
Los archivos de paquete "msi" contienen una base de datos que almacena todas las instrucciones y los datos requeridos para instalar y desinstalar las aplicaciones, llevando a cabo el instalador todas las tareas propias de la instalación, tales como copiar archivos a un disco duro, realizar modificaciones de registro, crear accesos directos en el Escritorio, etc.
Los paquetes se ubicarán en una unidad de red a la que tengan acceso de lectura los usuarios del dominio (normalmente una carpeta ubicada en el equipo "Windows 2003 Server"), y posteriormente a través de directivas de grupo de instalación de software se asignará dicho paquete a las estaciones de trabajo o usuarios del dominio deseados, de modo que cuando arranquemos una estación de trabajo que tenga asociada una directiva de instalación del paquete en cuestión, o cuando un usuario al que se le haya asignado un paquete se identifique en el dominio, las directivas de instalación del paquetes propias de cada caso se encargarán de distribuir el paquete en cuestión a la estación o al usuario respectivamente.
Otra ventaja de esta tecnología consiste en la posibilidad de desinstalación desatendida de paquetes instalados anteriormente, así como de las actualizaciones y modificaciones de paquetes previamente instalados, personalización de los paquetes "msi" mediante ficheros "mst", etc.
Como es obvio, al instalarse los paquetes "msi" a través de directivas de grupo, ante un "formateo" de una estación de trabajo, una entrada de una nueva estación de trabajo en el dominio, etc., los paquetes "msi" se reinstalarán de forma automática, pues el servidor "Windows 2003 Server" detectará que la directiva de instalación de software en cuestión no está siendo aplicada en dicho equipo, y pasará a aplicarla de forma automática; además si se produce un problema en una aplicación instalada en una estación de trabajo mediante un paquete "msi", podríamos solventarlo reinstalando el paquete por medio de la opción de reparación del "Panel de Control" de la estación de trabajo en cuestión.
En la distribución de paquetes "msi" podemos llevar a cabo tres posibles tipos de asociación:
Para realizar una gestión centralizada de la instalación del software, podemos utilizar los siguientes tipos de archivo.